La diferencia entre la piromanía y el incendio premeditado
La piromanía y el incendio provocado están asociados con el incendio, y las personas pueden usar estos términos indistintamente. Sin embargo, las dos condiciones no son iguales:
- ¿Qué es la piromanía? La diferencia clave entre la piromanía y el incendio provocado es que la piromanía es una enfermedad mental. De hecho, el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, quinta edición (DSM-5) incluye el trastorno por piromanía.
- ¿Qué es un incendio provocado? A diferencia de la piromanía, el incendio provocado no es una enfermedad mental, sino un delito grave. Ocurre cuando alguien incendia intencionalmente la propiedad de alguien con intención maliciosa. Cada estado tiene sus propias leyes con respecto a los incendios provocados. En algunos estados, el incendio provocado es automáticamente un delito grave. En otros, puede ser un delito grave o un delito menor dependiendo de los factores que rodean el delito.
Criterios para la piromanía frente al incendio premeditado
La piromanía y el incendio provocado difieren claramente en los criterios que los definen. El DSM-5 proporciona criterios de diagnóstico de piromanía, que describen que las personas con piromanía han prendido fuego intencionalmente más de una vez y han sentido tensión o excitación emocional antes del incendio. Una persona con piromanía también demuestra una fascinación por el fuego y obtiene algún tipo de placer al encenderlos o verlos. Para cumplir con los criterios de piromanía, una persona no puede prender fuego para obtener ganancias monetarias o participar en prender fuego como parte de un crimen o muestra de desviación sociológica.
Sin embargo, el incendio provocado cumple con los criterios exactos que descalifican a un persona de un diagnóstico de piromanía. Para empezar, el incendio provocado es un crimen y una muestra de desviación sociológica. El incendio provocado también puede ocurrir cuando una persona prende fuego a una propiedad para cobrar el dinero del seguro, lo que representa un incendio para obtener ganancias monetarias. Según los expertos legales, una persona que comete un incendio provocado está creando algún tipo de daño, y prendieron el fuego con la intención de causar este daño.
Causas de los comportamientos piromaníacos e incendiarios
Tanto con la piromanía como con los incendios provocados, existen causas subyacentes que contribuyen a este comportamiento anormal. Las causas del incendio son típicamente psicológicas, ambientales o genéticas.
Motivaciones para el comportamiento del incendio
Los estudios sobre la psicología de la piromanía indican que muchas personas con piromanía prenderán incendios para aliviar tensión acumulada. Sienten la compulsión de prender fuego y les fascina hacerlo. Además, están motivados para provocar incendios porque les provoca una avalancha emocional. Por lo tanto, encender fuego puede convertirse en un método para lidiar con el aburrimiento o los sentimientos de insuficiencia.
Sin embargo, las personas que cometen incendios pueden tener diferentes motivos. Por ejemplo, es posible que deseen obtener recompensas monetarias, razón por la cual algunas personas cometen un incendio en su propia propiedad para cobrar el dinero del seguro. Las investigaciones con mujeres que cometen incendios intencionales muestran que tienden a apuntar a la propiedad de personas cercanas a ellas, lo que sugiere que pueden estar buscando venganza.
También es posible que los problemas relacionados con la salud mental y las sustancias el uso puede motivar a una persona a cometer un incendio. Existe evidencia de que quienes se involucran en un incendio provocado tienen más probabilidades de sufrir estos problemas. La esquizofrenia y el abuso del alcohol son comunes entre las personas que cometen incendios provocados, y es posible que estar bajo la influencia del alcohol provoque un acto de incendio.
Causas ambientales
Los factores ambientales pueden contribuir tanto a la piromanía como al incendio provocado. En el caso de la piromanía, el conflicto y el estrés son factores del entorno que pueden provocar un comportamiento incendiario. Por ejemplo, un niño pirómano puede provocar incendios para hacer frente al estrés o los conflictos en el hogar, como la violencia, el abuso o la pobreza. Con los incendios provocados, los factores ambientales que influyen en el incendio pueden incluir el aislamiento social, la falta de educación y el desempleo. Las mujeres que son abusadas sexualmente también pueden ser más propensas a cometer un incendio.
Causas genéticas
También existe la creencia de que el comportamiento de provocar incendios puede ser genético. Por ejemplo, la piromanía entra en la categoría de trastornos del control de los impulsos, que en parte son atribuibles a la genética. Además, existen genes que están asociados con la impulsividad. Estos genes pueden alterar la actividad de sustancias químicas cerebrales como la dopamina, que está relacionada con el placer y la recompensa.
Diferencias en el manejo de la piromanía y los incendios premeditados
Con la piromanía etiquetada como una enfermedad mental y un incendio provocado como delito, puede haber diferencias de trato entre los dos. El tratamiento de la piromanía debe incluir terapia psicológica, y una forma específica llamada terapia cognitivo-conductual (TCC) puede ser especialmente útil para tratar la piromanía.
En la TCC, las personas aprenden a alterar sus patrones de pensamiento negativo y reemplazarlos por otros más saludables, formas de pensar más eficaces.La alteración de estos patrones puede cambiar el comportamiento y ayudar a las personas a desarrollar habilidades de afrontamiento más eficaces. Los medicamentos como los antidepresivos y los antipsicóticos también pueden ser útiles para tratar la piromanía. Las investigaciones muestran que hasta el 90% de las personas con piromanía también tienen otra afección, como un trastorno del estado de ánimo o una adicción. Debido a esto, el tratamiento por piromanía puede requerir que una persona reciba un tratamiento dual para abordar otros problemas subyacentes.
El incendio provocado es un delito, por lo que el manejo de esta condición puede implicar una sentencia de prisión. El tipo de sentencia por incendio premeditado generalmente depende de la gravedad del delito. Puede variar desde una multa para casos de incendio premeditado menos graves hasta una pena de prisión prolongada para casos graves en los que las personas podrían haber resultado perjudicadas.
Si bien el incendio provocado generalmente conlleva una sentencia penal, esto no significa que el tratamiento sea innecesario para los que cometen incendios. Como se señaló anteriormente, las personas que se involucran en incendios provocados probablemente vivan con otras afecciones, como esquizofrenia o trastornos por consumo de alcohol. Debido a esto, puede ser necesario tratar afecciones subyacentes. Los pirómanos también pueden requerir capacitación en habilidades sociales y podrían beneficiarse de la terapia cognitivo-conductual.
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- Fuentes
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