¿La cafeína empeora el TDAH?
La cafeína es una de las sustancias psicoactivas más populares del mundo, junto al alcohol y la nicotina. Es un estimulante menor que se encuentra en el café, el té y una variedad de medicamentos. La cafeína es un estimulante del sistema nervioso central que puede aumentar los niveles de energía, la vigilia y suprime el apetito. También puede causar algunos efectos secundarios como aumento de la presión arterial, insomnio y ansiedad. Debido a que la cafeína es tan frecuente, es importante saber cómo afectará a los medicamentos, los trastornos y las afecciones que está enfrentando.
El trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) es un trastorno que se cree que es causado por la falta de dopamina y norepinefrina en el cerebro. A menudo se trata con estimulantes. Entonces, ¿cómo afecta la cafeína al TDAH? ¿Lo hace mejor o peor? Obtenga más información sobre cómo esta sustancia común afecta a las personas que tienen TDAH.
¿Cómo actúa la cafeína en el cerebro?
Al igual que muchas drogas psicoactivas, la cafeína actúa influyendo en los receptores y sustancias químicas naturales en el cerebro. Específicamente, se une a receptores diseñados para interactuar con una sustancia química llamada adenosina. Cuando la adenosina se une a sus receptores, los activa para ralentizar la actividad del sistema nervioso y promover el sueño. Cuando alguien introduce cafeína en su sistema, puede unirse a los receptores de adenosina como antagonista. Eso significa que se une a los receptores y los mantiene inactivos, bloqueando la unión de la adenosina y activándola. Por esa razón, la cafeína puede retrasar el sueño y aumentar la vigilia. También desencadena la liberación de adrenalina, que es la hormona de lucha o huida. Eso puede crear sentimientos de energía elevada y mayor concentración.
Cafeína y TDAH
Aunque la cafeína es un estimulante y el TDAH a menudo se trata con estimulantes, la cafeína no funciona de la misma manera que los medicamentos como las anfetaminas. Si bien puede aumentar la vigilia, no causa los mismos efectos sobre la dopamina que hacen que los medicamentos para el TDAH sean útiles para tratar el trastorno. Sin embargo, la cafeína eleva los niveles de dopamina, pero beber una taza de café puede no ser tan eficaz como una dosis cuidadosamente prescrita de medicamentos para el TDAH.
La cafeína también contrae los vasos sanguíneos del cerebro de manera similar a como lo hacen los medicamentos para el TDAH. Se cree que la disminución del flujo sanguíneo puede ayudar a calmar las regiones hiperactivas del cerebro. Por la misma razón, la cafeína también se encuentra en algunos medicamentos para el dolor de cabeza.
Aún así, algunos de los efectos de la cafeína pueden empeorar algunos síntomas del TDAH. Por ejemplo, el TDAH puede causar insomnio y ansiedad, ambos efectos secundarios del consumo de cafeína. La falta de sueño también puede conducir a problemas cognitivos con los que una persona con TDAH ya puede tener problemas, como el olvido y la concentración.
Medicamentos con cafeína y TDAH
Los medicamentos con cafeína y TDAH como Ritalin y las anfetaminas son estimulantes. Tomar un medicamento estimulante y luego beber varias tazas de café puede provocar sobreestimulación, palpitaciones cardíacas, insomnio y otros efectos secundarios potencialmente graves. Por otro lado, tomar una cantidad moderada de café cuando está tomando un medicamento para el TDAH podría no causar ningún efecto adverso. Aún así, es importante preguntarle a su médico o farmacéutico si el café es seguro cuando está tomando el medicamento y cómo debe moderar la ingesta de cafeína. Si comienza a experimentar síntomas como dolores de cabeza, temblores, palpitaciones del corazón, ansiedad, alucinaciones o nerviosismo, deje de tomar cafeína y hable con su médico lo antes posible.